Juan Martínez
Los pescadores de la región a través de las cooperativas pesqueras solicitaron a las autoridades federales, se prorrogue la implementación de la veda del camarón que generalmente entra en vigor en junio.
El principal argumento manifestó Pilar Meza Cristóbal, ex delegado municipal del Poblado Higuerillas, es que la venta de escama y camarón está a la baja, de manera que dependerán de la comercialización del crustáceo para mantenerse económicamente en las próximas semanas.
“Esperemos que las autoridades federales consideren esta petición que sería de gran beneficio para los que de la actividad de la pescan viven, sobre todo ahora que la pandemia del coronavirus ha afectado económicamente a las familias”, dijo.
Comentó que incluso los precios del camarón están a la baja derivado principalmente a que hay muy poca demanda de los productos pesqueros, porque la clientela no puede desplazarse a la zona de la laguna Madre ni a la Playa Bagdad.
“La situación de la pandemia del CIVD -19 nos mantiene marginados de la ciudad, aquí por ejemplo en la zona de la laguna Madre, el kilogramo de camarón crudo cocktelero oscila entre los 25 y 30 pesos y el cocido alrededor de los 130 pesos”, indicó.
En tanto el camarón jumbo su precio se ubica aproximadamente en los 150 pesos, costos que se elevan obviamente aquí en la ciudad.
“Los pescadores tienen que acudir a la ciudad para ofertar su producto y obviamente el precio se eleva al cargarle lo del gasto de combustible, pero insisto la gente pide mucho el camarón y nos sería de gran beneficio que se prorrogue la veda del crustáceo”, agregó.