POR: Juan José Ramírez
Desde hace varios sexenios el Gobierno de los Estados Unidos ha querido decretar a los delincuentes organizados de México como terroristas, porque dentro de los tratados internacionales de seguridad señalan que podrían intervenir las corporaciones policiacas en este país para poderlos combatir.
Siempre que llega un presidente nuevo a México las insistencias de los Estados Unidos es la misma, querer meterse a la seguridad de este país, porque debido a la vecindad se sienten amenazados por estos grupos delincuenciales.
Durante todos estos años la insistencia se basa en los hechos que van surgiendo en México, desde la muerte del agente de la DEA, Eduardo Camarena, hasta la familia LeBarón hace unos años donde se presume que los vehículos fueron confundidos y hasta la fecha no ha quedado muy claro los homicidios.
Ahora es Tamaulipas, con el secuestro de los 4 estadounidenses, de los cuales dos murieron; uno sigue herido y una sobreviviente, el tema que siempre está presente lo han revivido, ante el llamado del FBI, pese a que estas personas eran delincuentes, pero al final de Estados Unidos.
Todo ello ha llevado a un intenso debate en los Estados Unidos con el gobierno de México de declarar que los grupos delincuenciales son terroristas y por ello las agencias policiacas estadounidenses están listas para actuar en este país.
Este hecho ha dado la pauta que las agencias policiacas deben de intervenir porque los delincuentes son una amenaza para la frontera, pero además porque el Gobierno Mexicano no puede con ellos y hasta sospechan que están coludidos.
Sin embargo ante esta situación, podríamos decir que el presidente Andrés Manuel López Obrador defiende bien a México, donde indica que no habrá intervención alguna y que no permitirá que en este tema el gobierno de Joe Biden se meta, porque todo está bajo control y aquí no pasa nada.
Lo que sucedió en Matamoros sin duda es algo muy grave para los estadounidenses, quienes así lo califican incluso con alertas para que no crucen a Tamaulipas y otros Estados del País, pero siguen insistiendo de la intervención de los Estados Unidos.
Pero ¿qué pasaría si alguna autoridad autorizara esta situación?
La intervención de las agencias como la DEA o el FBI estarían ya buscando afanosamente a los narcotraficantes más sonados del país, porque lo que han hecho mucho daño a la sociedad de México, pero que representa un peligro para los Estados Unidos.
Esta situación podría ser posible si el Gobierno Mexicano lo permite, pero hay quienes dicen que no lo van hacer debido a que existe un presunto nexo con los grupos delincuenciales o de plano este país podría perder autonomía en sus instituciones, pero lo más delicado es que son las de seguridad.
Sin embargo por lo pronto el intento de Estados Unidos seguirá, mientras que el gobierno de López Obrador se defiende y el de Biden no detiene a ningún grupo delincuencial que compra las cantidades grandes de droga en su país, pero que también le vende a México las armas que se utilizan para matar incluso a sus propios estadounidenses.
POR AQUÍ Y POR ALLÁ
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RETAZO
Poca ayuda el que no estova.