Juan Martínez
Para los miles de personas que cruzaban a los Estados Unidos a donar el plasma, les cambio la vida radicalmente ahora que el gobierno de ese país prohibió el ingreso, al considerar que muchas personas lo hacían con el propósito de irse a trabajar.
“Laura”, quien pidió se les reservaran sus apellidos, manifestó que los planes para ella le cambiaron por completo, debido a que ella vivía prácticamente de la donación del plasma, y ahora tendrá que buscar trabajo para pagar deudas y aportar el gasto de la casa.
“Prácticamente ese ingreso ya lo contemplamos de forma segura, pues de ahí se compraba la canasta básica y abonaba a los préstamos que tengo, debido a que en mi caso acudía dos veces a la semana y me ganaba 120 dólares”, dijo.
Mencionó la entrevistada que la última vez que acudió al Plasma en la ciudad de Brownsville, fue el pasado domingo, fecha en que también se enteró de la restricción de las personas con visa de turista que acuden al plasma, de manera que fue un duro golpe para la economía de este considerable grupo de donadores.
Por el Puente Nuevo Internacional agregó, cientos de personas residentes de la ciudad y de los ejidos cruzaban para donar plasma y ahora con la prohibición están ya en busca de trabajo en esta frontera para hacer frente a las necesidades básicas de la familia.