Juan Martínez
La crisis económica provocada por la pandemia del coronavirus ha obligado a la clase obrera que ha sido desempleada, a cruzar a los Estados Unidos, y obtener un ingreso al vender su sangre en banco denominado “Centro de Plasma”, fenómeno que cada día va en aumento.
Lucía, quien pidió se le reservaran sus apellidos, cuenta con 21 años de edad, ella manifestó que fue en el mes de diciembre pasado, cuando acudió por primera vez al Centro del Plasma en la ciudad de Brownsville, y a la fecha son alrededor de 14 ocasiones las que ha acudido a que le extraigan esa sustancia.
“Yo voy dos veces por semana, pero hay quienes van hasta 3 veces al día, de manera que cuando me toca ir, llego a las 4:30 de la madrugada al puente internacional y ya para ese entonces hay mucha fila al grado que hacemos de 2 a 2 horas y media para cruzar, además de otras 2 horas en la fila del plasma”, agregó.
Señaló que por ser donante de nuevo ingreso se le pagaron 65 dólares por sesión, de manera que al acumular 3, se le sumó al pago un estímulo de 100 dólares, para posteriormente pagarle a razón de 45 dólares la sesión.
“Las personas que ya tienen mucho tiempo donando plasma, les pagan a 30 dólares la bolsa, pero en mi caso yo ya me voy a retirar porque últimamente me he sentido mal, me dan mareos y voy a ver si me dan trabajo en una maquiladora”, dijo.