Juan Martínez
Los migrantes que se localizan en el Campamento ubicado en el bordo del Río Bravo, frente a las oficinas del Instituto Nacional de Migración, en el Puente Nuevo Internacional, se quejan de continúan en condiciones no aptas para el desarrollo humano.
Manifestaron que por ejemplo recientemente organizaciones altruistas que les donaban leña que utilizan para cocinar, ya no lo hicieron y tampoco se les permite por parte de las autoridades introducir este material.
En ese sentido señalaron los quejosos, quienes pidieron se les reservara su nombre, que, si bien es cierto que muchos de los migrantes no quisieron ser reubicados en instalaciones propias para una estancia saludable, en ese lugar las condiciones son muy insalubres.
“Aquí nadie hace nada y si les decimos los problemas que existen aquí en el campamento, pues pasa desapercibido y así continuamos, aunque cada vez son menos los migrantes que seguimos aquí en bordo del Río Bravo”, expresó.
En ese sentido hizo mención que de más de 2 mil migrantes que estuvieron concentrados en el campamento en la actualidad son algunos 600 los que siguen en ese lugar, porque no se les ha resuelto su petición ante las autoridades migratorias de los Estados Unidos.
Dijeron que continúan en la incertidumbre, ello ante el cambio del titular del Poder Ejecutivo en los Estados Unidos, que, aunque la esposa del Presidente electo, visitó ese campamento en diciembre pasado y les prometió apoyarlos, desconocen si se cumplirá esa promesa.